¿Quieres ayudar a tu gato a relajarse? Pues olvídate de darle valeriana. La valeriana en gatos tiene el efecto contrario al que tiene con los humanos.
Sí, así como lo lees: la valeriana es para tu gato lo que para nosotros puede ser un chute de cafeína, e incluso puede llegar a crearles adicción.
La valeriana es una hierba muy utilizada «entre los humanos» y que se acostumbra a tomar en forma de té. Su poderoso efecto relajante y ansiolítico es una de sus principales virtudes, pero seguramente no sabías que causa el efecto contrario en los gatos.
Los efectos de la valeriana en gatos son similares a los de la hierba gatera. En este artículo te lo cuento todo sobre cómo darle (o no) valeriana a tu gato.
Si quieres conocer alternativas naturales a la valeriana, lee directamente aquí.
¿Cómo darle valeriana a un gato?
A continuación te presentamos varias formas de ofrecerle valeriana a tu mascota si deseas que la pruebe por primera vez, pero, antes que nada, debes saber que el animal debe estar totalmente sano para que la consuma sin riesgo de efectos secundarios.
Además, es importante tener en cuenta que no debe ser administrada sin control, ya que puede resultan adictiva en gatos, lo cual incrementaría su nerviosismo y ansiedad por seguir tomándola.
Si crees que tu gato está sufriendo estrés o ansiedad por algún motivo que no puedes controlar, como por ejemplo el ruido de los petardos o los truenos, lo recomendable sería acudir al veterinario con antelación para que pueda recetarte una opción compatible con tu gato teniendo en cuenta su edad y estado de salud. Además, te indicará la dosis adecuada en cada caso.
Estas son algunas formas en las que se puede administrar valeriana a los gatos:
- En forma de infusión tibia
- Ofrécele la bolsita de té recién sacada de la caja y deja que él mismo la rompa y saque el contenido para poder lamerlo.
- Restriega la bolsita en sus juguetes para que el olor se quede impregnado en ellos.
- Puedes atar la bolsa de té al extremo de un palo para que juegue.
Ten cuidado con las cantidades y la frecuencia, y consulta siempre a tu veterinario.
Efectos de la Valeriana en los gatos
Los efectos del consumo de valeriana serán inmediatamente visibles en tu gato. Pasará a ser el más tímido al más alegre y juguetón, a revolcarse por el suelo y a maullar más de loo habitual. Sus pupilas se dilatarán y entrará en un estado de excitación.
Explicación del efecto valeriana en los felinos
Algunas investigaciones han concluido que la valeriana contiene sustancias estimulantes, que afectan directamente a su sistema nervioso y generan un efecto similar al de las feromonas de gatos en celo, que sólo son detectables por los felinos y que causan euforia, excitación, placer y bienestar.
Ese mismo efecto lo provoca la lejía y otras sustancias químicas. Por ejemplo, si limpias el suelo con este químico, notarás que tu gato de inmediato se sentirá atraído y empezará a maullar y a restregarse por el suelo.
Sin embargo, no friegues muy a menudo con lejía ya que eso estimula la micción en los gatos. Prueba colocando unas gotas en su arenero para que orine allí. ¡Ya verás como funciona!
Otras plantas que causan efecto de entusiasmo similar son:
- la hierba gatera,
- la albahaca y
- el olivo
Tranquilizantes naturales
Si lo que quieres es un tranquilizante natural para tu mascota (y una vez has descartado la valeriana), puedes probar con algunas de las siguientes opciones. Como sabes, es importante preguntar antes a tu veterinario de confianza para que te asesore acerca de cuál es el más adecuado para tu gato.
1) Melisa
Se trata de una planta utilizada para combatir el estrés y la ansiedad. Se recomienda administrarla antes de una mudanza o viaje para calmar los nervios que pueda producir el evento.
2) Espray de feromonas
Se trata de una mezcla sintética de feromonas que tienen un efecto tranquilizador en los gatos. Es muy útil para casos en los que nuestro gato está muy nervioso cuando está en una zona concreta de la casa o cuando queremos que no «saque todo su instinto», por ejemplo cerca en los sofás si siempre acude a ellos para hacerse la manicura.
3) Ignatia Amara
Es un remedio homeopático sin efectos secundarios. Son unas semillas que se obtienen del árbol de fríjol San Ignacio, y que son famosas por ayudar a tratar la ansiedad. Nuevamente, siempre es recomendable consultar antes al veterinario, aunque la dosis más habitual son 5 gránulos diluidos en 5 mililitros de agua, que pueden darse hasta tres veces al día.
4) Flores de Bach
Las Flores de Bach son todo un mundo, y por si no habías oído hablar de ellas, son una serie de plantas identificadas por el médico inglés Edward Bach a principios del siglo pasado que permiten mitigar determinadas dolencias. Derivado de sus estudios, se ha visto que algunos de estos remedios eran también aplicables en animales, y en concreto en gatos.
Para casos de estrés y ansiedad puedes usar los extractos de Rescue Remedy, Rock Rose o Cherry Plum. Lo recomendable es que sea un terapeuta floral con experiencia en terapias con animales quien te haga una prescripción.
5) Hidrosol de lavanda
Este hidrosol se obtiene durante el proceso de destilación de la lavanda. Cuando se destila la planta, se generan dos líquidos. Uno es la esencial y el otro es el hidrosol. El hidrosol está mucho más rebajado lo que hace que su olor no sea tan fuerte y sea más seguro. Debido a su estado líquido, podemos administrarlo en forma de spray. Rocía a tu gato dos veces al día con esta mezcla y lograrás un efecto tranquilizante.
A parte de estas opciones, es importante analizar el entorno del animal y alejarlo de cualquier agente que le esté generando ansiedad. Intenta que esté lo más cómodo posible. También intenta aportarle cariño, cuidar su alimentación e intentar que haga ejercicio. Todos estos factores ayudarán a reducir el estrés en tu felino en el largo plazo.
Consejos finales
- No intentes relajar a tu gato con opciones naturales si no conoces sus efectos secundarios y no cuentas con la orientación de un especialista.
- Los gatos son muy sensibles a los cambios y eso incluye alteraciones en su sistema digestivo. No experimentes con plantas, ya que algunas que pueden ser perfectamente aptas para humanos podrían no serlo para los gatos, y producir efectos totalmente contrarios, como ocurre precisamente con la valeriana.
- Los relajantes especialmente diseñados para gatos que venden en tiendas veterinarias normalmente son seguros para tu felino.
- Una vez tu veterinario te dé el visto bueno, si le has cambiado la marca del pienso y se niega a comerlo, puedes mezclarlo con un poco de valeriana en polvo para que se sienta atraído.
- En ningún caso deberías darle valeriana indiscriminadamente. Esta sustancia puede resultar adictiva.
- En lugar de darle valeriana natural a tu gato, puedes darle valeriana farmacológica y con dosis recomendada por un veterinario. De cualquier forma, antes de intentar darle por primera vez, consulta con tu veterinario de confianza.