A la mayoría de los gatos domésticos les encanta que les acaricien. Seguro que a tu mascota también. Es un momento que todos los que tenemos felinos en casa disfrutamos y agradecemos.
Pero, ¿qué pasa cuando el pelaje está lleno de nudos? Sabemos que es una sensación incómoda tanto para el gato como para quién lo acaricia, pero que tiene fácil solución.
Quédate con nosotros y te daremos una pequeña guía de cómo mantener el pelaje de tu gato sano e hidratado.
Proporciónale una alimentación equilibrada
Este es nuestro primer consejo ya que una correcta alimentación te dará la base para un pelaje sano. Aunque la cantidad de alimentos que debemos suministrar a nuestro gato puede variar según la raza, la calidad del alimento debe ser la más alta siempre.
Los detalles de cada raza de felino te los puede proporcionar tu veterinario de confianza, pero por como norma general, una dieta equilibrada incluye grasas buenas y ácidos grasos como el Omega 3 y 4, que contienen el atún, la sardina o el salmón.
Los felinos son carnívoros así que una alta cantidad de proteínas, procedentes de la carne y el pescado no deben faltar.
Aunque puedes darle una dieta hecha en casa, la alimentación comercial contiene todos los nutrientes que necesitan para mantenerse sanos.
Mantén una higiene adecuada
Aunque los gatos son unos de los animales más limpios que existen, ya que parte de su día se lo pasan acicalándose, es muy común que su pelo se anude o que ocumule residuos.
Tú puedes ayudarlo con un baño mensual. Aunque es una creencia popular de que a los gatos no les gusta el agua, eso es falso. Ellos disfrutan de un buen chapuzón, sobre todo en días calurosos.
Esa creencia de que no les gusta bañarse está fundamentada en la misma razón que te explicamos anteriormente: los gatos se asean a diario, ellos mismos lamen la suciedad de su cuerpo por lo que bañarse no es su prioridad, pero eso no significa que les moleste un poco de agua de vez en cuando. Solo debes acostumbrarlo.
Para limpiarlo, usa un champú especial para animales peludos, así contribuirás a abrillantar su pelo y que luzca más sedoso e hidratado.
En caso de que sea un champú para humanos, dilúyelo en agua ya que puede causar alergias o secarle la piel. Pregunta en la clínica veterinaria o en la tienda especializada por uno especial para gatos, a que no tenga olores preferiblemente. Nunca uses un champú para perros, es mejor en ese caso usar solo agua para bañarlo.
Si el gato está intranquilo, no lo bañes. Espera otro momento como, por ejemplo, después de comer, así evitarás que te muerda, quiera escaparse o arañe.
Elimina los nudos
Un pelaje sucio está pegajoso y enredado, por lo tanto, para desenredar los nudos es necesario eliminar también la suciedad.
Por lo general, los gatos de pelo largo son más propensos a un pelo apelmazado, es por ello que el cepillado es una técnica fundamental en el aseo del felino.
Para los gatos de cabello corto, con una sesión de cepillado de 5 minutos, una vez al día y un total de dos o tres veces a la semana, será suficiente. Para los de pelo largo tendrás que repetirlo hasta tres veces al día.
Ésta es una manera sencilla de mantener los nudos a raya y de hacer que tu gato se sienta más cómodo ya que el pelo apelmazado les molesta y puede hacer que se rasque demasiado, ocasionándole heridas y arañazos.
¿Dónde se forman los nudos?
Comúnmente, los nudos más rebeldes se forman en los lugares de difícil acceso para el animal, como detrás de las orejas, en las axilas y detrás de los muslos.
En los casos extremos, los nudos pueden ser tan grandes que pueden impedir que se vea la piel. En esos casos, no se pueden eliminar con el cepillado, por lo que en alguna ocasión puede ser necesario que el veterinario haga un pequeño corte para lo que habrá que sedar al felino Así que, para no llegar a esos extremos, un correcto y frecuente cepillado será la mejor prevención.
Utiliza un cepillo de dientes metálico con puntas redondeadas que sean lo suficientemente largas como para traspasar el espesor del pelo, o de lo contrario no servirá de nada. Para los de pelo corto, un cepillo de goma hará muy buen trabajo sin dañar la piel del felino.
¿Cómo cepillo a mi gato?
La técnica es muy sencilla. Sigue estos consejos si estás pensando en hacerlo por primera vez:
- Para cepillar a tu gato la clave está en hacerlo con mucho cariño, como si estuvieras acariciando al gato. Eso hará que el gato se sienta relajado y colabore.
- La sesión deberá ser corta para que el animal no se estrese. No más de 5 minutos.
- Cepilla siempre la parte interior del cuerpo. No te olvides de las patas.
- Dale un premio al final de la tarea
- Repite a diario para que el hábito se convierta en rutina.
- Hazlo con el pelo seco.
- Si los nudos son muy densos, utiliza un producto desenredante especial para animales.
¿Qué hago si no puedo desenredar el pelo de mi gato?
Si el pelo de tu felino está demasiado apelmazado y no has podido desenredarlo, todavía te queda una última carta bajo la manga: el rasurado.
Para ello deberás usar una máquina esquiladora para gatos con una cuchilla N7 o 7F para rasurar todo el cuerpo.
Separar el pelo que está alrededor del nudo lo máximo posible sin estirar y cortarlo con una tijera punta roma también te ayudará si con el cepillado no ha cedido.
Si tiene muchos nudos, haz la eliminación en varias sesiones para que tu gato no se estrese.
Muda de pelo natural
El cambio de pelaje en los felinos es un acto seguro y muy natural, sobre todo en los cabellos largos. Aunque durante el acicalamiento ellos logran desprenderse de la mayoría del pelo, hay ciertos lugares donde ellos no pueden acceder y allí, el cepillado ayuda, además de desatar los nudos, a que se caiga el pelo que debe mudar.
No hay motivo para estresarse. Tener bolas de pelo por toda la casa es una consecuencia de tener un gato como mascota. Una correcta alimentación, buenos hábitos de higiene y el cepillado constante mejorarán en gran medida la cantidad de pelo que mude.